Orígenes de la Feria de Abril
Los orígenes de la Feria de Abril no son andaluces. Fue puesta en marcha por un catalán y un
vasco, que decidieron realizar una feria de ganado en Sevilla, dando lugar a su primera
edición en 1847.
Orígenes de la Feria de Abril
En 1877, durante la visita de la Reina Isabel II a la Feria de Abril, el pintor Gustavo
Bacarisas creó los famosos farolillos de papel, inspirados en lámparas de estilo chino,
para impresionar a la reina. Desde entonces, los farolillos se han convertido en un
elemento emblemático de la feria.
Originalmente la Feria de Abril se encontraba ubicada en el Prado de San Sebastián,
pero en 1973 se trasladó el recinto ferial a Los Remedios, donde se encuentra ubicado
en la actualidad.
Orígenes de la Feria de Abril
Los famosos trajes de flamenca están inspirados en la vestimenta que lucían las
campesinas, las mujeres de la capital se inspiraron en ellas por lo favorecedor que
resultaba este atuendo, convirtiéndose así en el traje típico de la Feria.
En el año 1990 los caballos no pudieron participar en la Feria y no se pudieron ver los
famosos carruajes, ni jinetes y amazonas, esto se debió a una epidemia de peste
equina que afectó a toda Andalucía.
La calle dedicada a las atracciones o “cacharritos” se conoce como calle del infierno,
debido al ruido que producen sus más de 100 atracciones. Se trata del mayor parque
de atracciones provisional de España, una vez finalizada la Feria todas las atracciones
son retiradas.
La mayoría de las casetas de la Feria son privadas, sin embargo, El Real cuenta con un
amplio número de casetas públicas abiertas a todo el mundo.
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